miércoles, 22 de diciembre de 2010

Y ya las horas y los días se hicieron humo entre sus labios. No dejaban que hubiera espacio entre su piel que no fuera igual o inferior a dos milímetros. Y él se vició a sus ojos, y los miró hasta no ver más allá de sus olivos.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

De copos y almas en el congelador

Al final nevó. Vi nevar, era la primera vez. Y la nieve trajo cambios, aunque tal y como vino, desapareció. Ni siquiera pude deshacerla con las manos como siempre hago con el tiempo. Tan sólo apareció de repente, y lo supe por una llamada de teléfono. "¿Te has asomado a la ventana? Tengo el abrigo blanco". Y salí al balcón muerta de frío sin pensármelo. Como tampoco me pensé impregnarme en el polvo que acumulaste en mi cama. Contigo también sentía frío, pero era de otra manera. A tu lado siempre me temblaban los muslos. Y a veces tal vez se me estremeció el corazón, aunque siempre lo niegue si me preguntan, porque ni yo misma estoy segura. El invierno envolvió hasta nuestras pupilas y sus brillos y ni siquiera lo intentamos evitar.
Pero desde entonces no ha vuelto a nevar, ni tú has vuelto a aparecer.

miércoles, 8 de diciembre de 2010


1 1 1


c i e n
t o · o n c e

que se dice pronto :)

miércoles, 1 de diciembre de 2010

December

Está a punto de nevar. Me gustan estos momentos en los que todo el mundo espera algo, expectantes, atentos al cielo y a sus mullidas y grises nubes. Como si todo se detuviese. Yo incluso miro las páginas del tiempo varias veces. Hace que me vuelva impaciente.

Ahora, que estamos todos tan lejos, aunque casi nos rocemos por las calles, algo nos une. El frío, el aliento nublado calentando las manos y las farolas reflejadas en los ojos desde por la tarde. Y Diciembre.

Acabo de mirar por la ventana. Está a punto de nevar.