sábado, 24 de diciembre de 2016

punto de libro. marcapáginas.

Despéjame las nubes de los ojos,
lava los enredos de mis manos,
dime que podemos.


Límpiame el plomo del pecho, aunque no lo veas.
Aunque yo no te deje.
Oblígame a mirarme y no escupir.
Derrama todos los saleros de la mesa.
Lámeme donde acabe la pena.

Que prefiero la tierra de nadie contigo a un reino con cualquiera.

Que tu significado excede todas mis palabras, da igual cuántas páginas pase.
Y doblo todas las esquinas de las hojas. Y rodeo y aislo los puntos finales.


La culpa se torna rojo.
Te miro sin verte.
Y todo se funde en negro.

Nacimos de la risa y el desvelo. Desde entonces nunca quiero morirme.