Siempre fue el eterno patito feo. Nunca tuvo novio en párvulos ni su primer beso fue a los seis años, y tampoco ningún niño se fijó en ella o la agarró de la mano en los recreos. Y siempre la tocaba ser el "Power Ranger" amarillo... la chica guapa de clase, además era la más espabilada y astuta (que no inteligente) y se le adelantaba.
Así que creció soñando acaparar las miradas de todos, reunir todas las que no tuvo nunca. Quería ser capaz de enamorar a cualquiera, como las princesas de las cintas de video de cada tarde.
Dicen que de pato ya no tiene nada y, sin embargo, ella se mira y comprueba que aún conserva el plumón.
Me callo lo que estoy pensando sobre la última frase xDD
ResponderEliminarSabes que enamoras allí donde vas, ya no eres ese pato ni ese power rangers, eres mucho más que eso
No soy yo! Es Mrs.Robinson!
ResponderEliminaroh! que descreipción tan perfecta ...
ResponderEliminarel patito feo se hizo cisne! (no es esa la historia que contaban los padres cuando eramos niños?)
ResponderEliminarYo siempre pienso en que el momento de la transformación llega cuando menos lo esperamos, pero qué pasa si no dejamos nunca de esperar,¿llega más tarde, entonces?
ResponderEliminar¿Qué esperar cuando estamos esperando?
Me gusta tu blog, escribes deliciosamente bien.
Un saludo :)
Oyeee pues a mi me gustaba la Power Ranger amarilla (tengo una), la otra era una tonta rubia y rosa...
ResponderEliminarNunca he sido fanática de lo rosa ni de las rubias... xD